Tercios del mar. Historia de la primera infantería de marina española
Magdalena de Pazzis Pi Corrales

A lo largo de estas páginas se ha visto combatir y enfrentarse a las penurias a los hombres de los tercios embarcados; los hemos acompañado en esas fortalezas flotantes, erizadas de remos o de cañones. Hemos visto también cómo ese modelo de ejército prácticamente fue invencible a lo largo de siglo y medio de historia de España y el continente europeo, para luego ir desapareciendo paulatinamente con la aparición de los ejércitos modernos. Sus hazañas pesaron más que el miedo de los hombres a la pelea, su valor hizo siempre sombra a las deserciones y motines que protagonizaron. Fueron, en definitiva, hombres como nosotros, los soldados más admirados y temidos de Europa”.

Estas palabras finales de Los Tercios del Mar. Historia de la primera Infantería de Marina Española*, de Magdalena de Pazzis Pi Corrales, facilitan al lector un buen resumen de lo que puede encontrar en el libro. Se engañaría, sin embargo, quien pensase que la obra es solo una más de las numerosas que, en los últimos tiempos, tratan, con mayor o menor fortuna, asuntos de historia militar. Lo que la distingue del resto es, en primer lugar, la singular combinación de dos temas: la Armada y las tropas de infantería (los tercios) que embarcaban en ella para participar en combates navales o en los desembarcos con los que intentaban asegurar la posesión de los respectivos territorios, ya fuesen en Flandes, en Italia o en el norte de África.

En segundo lugar, el libro de Magdalena de Pazzis se asienta sobre un serio trabajo de investigación, puesto de relieve en no menos de setenta páginas de notas y veinte de bibliografía. La lectura del texto puede, por supuesto, prescindir de las primeras (están agrupadas al final de la obra), pero a costa de perder la conexión documental entre aquel y las fuentes de las que procede. No es lo mismo, por ejemplo, la exposición general sobre el sistema de asientos, por los que un particular se encargaba de aportar las naves necesarias para organizar y aprestar una armada, bien proveídas de gente de mar y de remo, así como de artillería, que fijar la atención en cualquiera de las numerosas cédulas de asientos guardadas en los archivos españoles, que la autora ha consultado y cita: valga como ejemplo, la expedida por Felipe III a Vicencio Centurión “para sustentar y mantener a su costa cinco galeras de la escuadra de España, y servir con ellas y con otras cuatro que ha de armar” (nota 29 del capítulo II, que transcribe el documento nº 6665.480 del Archivo General Militar).

La obra comienza con una exposición acerca de la estrategia marítima de la Monarquía Hispánica, obligada a dominar el mar para proteger sus posesiones, defender las rutas marítimas que permitían acceder a ellas y salvaguardar, con el apoyo de convoyes de escolta, las expediciones comerciales, especialmente con las Indias. La dispersión de territorios en el Mediterráneo, en el Atlántico y en el Pacífico requería, en efecto, un formidable (y costoso) esfuerzo naval, que se mantuvo durante los siglos XVI y XVII.

Esa organización naval servía, simultáneamente, para transportar fuerzas de ataque, agrupadas en armadas, que integraban soldados de infantería subidos a bordo. Los escenarios bélicos en los que debían participar variaban (operaciones de asalto, anfibias, de asedio o entre dos escuadras), como variada era la tipología de combates navales. Entre esas fuerzas de ataque destacaban los tercios, sobre cuyos orígenes, sus efectivos, sus tácticas militares y su actuación versa uno de los capítulos del libro.

Para comprender mejor qué suponía el embarque de esas tropas, la autora analiza, de manera exhaustiva, cómo se organizaba y se ponía en marcha una operación marítima. Las dificultades de avituallamiento, la leva de marineros, la provisión de armas y de cañones, la construcción de los navíos y las clases de estos son otras tantas cuestiones que aborda, siempre con la mirada puesta en los documentos de archivo que sirven como respaldo concreto a sus afirmaciones. Una vez a bordo, la vida de los embarcados no era fácil, sujetos como estaban a las enfermedades o a la falta de higiene y de víveres, y se tornaba especialmente peligrosa cuando habían de participar en operaciones de combate en el mar. De nuevo el relato se torna más vivo gracias a las fuentes de la época, de las que destacan Antonio de Guevara, que describió en 1539 la vida en una galera, y Tomás de la Torre, cuyo viaje desde Salamanca a México, en 1544 y 1545, expuso por escrito.

El libro da cuenta de numerosas intervenciones de los tercios, ya terrestres (hasta Rocroi), ya navales. De estas últimas se describen tanto las victoriosas (en particular, la de Lepanto en 1571 y las campañas de las Azores, en 1582 y 1583) como las derrotas (la jornada de Inglaterra en 1588, la batalla de las Dunas en 1639), entre otras muchas que tuvieron lugar a lo largo de las costas inglesas, francesas, de los Países Bajos, del Océano Atlántico, del Mar del Norte o del Mediterráneo.

La descripción de esas acciones se ve enriquecida, en algunos casos, con las fuentes documentales archivadas y con las narraciones que de ellas hicieron grandes literatos quienes, a la vez, intervinieron personalmente en las gestas. La descripción de Lepanto efectuada por Miguel de Cervantes, participante de la batalla, es paradigmática, pero junto a su testimonio figuran los de otros autores, como Mateo Alemán, Lope de Vega, Francisco de Quevedo o Alonso de Contreras, que cuentan sus vivencias en primera persona.

En suma, el trabajo de Magdalena de Pazzis nos ofrece una visión renovada de nuestra historia naval, ahora completada con la perspectiva de las tropas de asalto y de combate que transportaban los navíos al servicio de la Monarquía Hispánica. Nos permite, así, descubrir una faceta de esta última que siempre habíamos dado por supuesta, pero cuyos detalles no habían sido hasta ahora expuestos en su conjunto con la maestría y el rigor documental que caracterizan a este libro.

Magdalena de Pazzis Pi Corrales es catedrática de Historia Moderna en la Universidad Complutense de Madrid, donde dirige asimismo la Cátedra Extraordinaria de Historia Militar. Sus principales líneas de investigación han sido la Marina y el Ejército en los siglos XVI y XVII y las relaciones hispano-suecas en la Edad Moderna.

*Publicado por La Esfera de los Libros, junio 2019.